La cocina es uno de los lugares neurálgicos en un hogar, pues ahí nos reunimos con la familia y preparamos los alimentos. Debido a esto, es un sitio que acumula humedad y suciedad, por lo que demanda cuidados y reformas con el tiempo. Si tu cocina blanca ya necesita un cambio, no puedes perderte estas 5 ideas, poco vistas pero adaptables a todos los gustos, para darle una apariencia diferente.
Cocina blanca sin tiradores
Si estás buscando una cocina blanca que resalte por su sencillez y aspecto minimalista en el diseño, una cocina blanca sin tiradores te vendría muy bien. Hay que recordar que esta última es aquella que no tiene instalada en sus muebles tiradores de asa o pomos para abrirlos.
La colocación de tiradores suele ser lo más usual, pero una cocina blanca sin tiradores proporciona muchos beneficios, ya que su mantenimiento se torna más fácil, pues no hay un objeto externo qué limpiar (sin mencionar que algunos de ellos deben ser limpiados con productos especiales). Además, si trabajas mucho en la cocina, no tendrías que tropezarte con ellos.
Cocinas con isla en blanco y negro
Si tu cocina blanca te encanta, pero deseas agregarle un toque moderno y elegante sin perder su esencia clásica, añadir una isla en blanco y negro sería una buena alternativa a considerar. Dependiendo de lo que quieras lograr, se le puede otorgar a la cocina un matiz industrial y sobrio con electrodomésticos fabricados en acero inoxidable.
Cocinas con azulejos blancos grandes
Si posees una cocina de medianas dimensiones y quisieras que esta luciera más grande, así como con un aire más pulcro, la instalación de azulejos blancos grandes está más que recomendada. Esta idea está liderando las tendencias en ornamentación del hogar, pues le otorga más uniformidad a las paredes, y, así la estancia da una sensación de mayor tamaño.
Asimismo, si tu cocina presenta un estilo contemporáneo, combina bastante bien, a diferencia de con estilos más rurales o rústicos. También es importante resaltar que este tipo de azulejos, tras ser situados, poseen menos juntas, y, por ello se concentra menos suciedad. Por ende, son mucho más prácticos y aseados que los pequeños. Si eres una persona muy ocupada, de esas que cuentan como poco tiempo para limpiar, te serán muy atractivos.
Cocinas rústicas blanco envejecido
Ahora bien, si amas la sensación de naturalidad que confiere una cocina rústica, pero no quieres renunciar a la apariencia impoluta de las cocinas blancas, esta propuesta funcionará para ti: una cocina rústica, donde prevalezca la madera y los tonos marrones en conjunto con algún mueble o elemento en blanco envejecido; un tono que compagina mejor con este estilo que el blanco puro.
Esta idea puede ser aplicada en la encimera, islas, mesa y sillas. Los muebles en tonos envejecidos son otra tendencia en decoración popular entre aquellas personas que aman el estilo campestre. Sin embargo, puedes colocarle un toque moderno, si lo deseas, jugando con electrodomésticos de acero o alguna pieza más elegante.
Cocinas en rosa y blanco
Estos tipos de colores son perfectos para aquellas personas que buscan crear un ambiente femenino, cálido y relajante, sin dejar de lado el efecto clásico y minimalista del color blanco. Además, es común añadir el color blanco como una manera de crear un balance con el rosa, sobre todo si elegimos una tonalidad fuerte.
Podríamos utilizar el color rosa en algunas paredes, ciertos electrodomésticos, sillas, cortinas; mientras el blanco viene bien en mesas, encimeras e islas. En suma, si alguna de estas propuestas te ha inspirado, te invitamos a comunicarte con nuestro equipo, el cual estará encantado para guiarte a crear tu cocina de ensueño.